Con la llegada del otoño, comienza una serie de eventos climatológicos que propician a la formación de amenazas de ciclón e inundaciones en la zona de la Península de Yucatán.
En esta temporada, comienza de forma gradual el descenso a las latitudes de las masas de aire frío ubicadas en el polo norte e interactúan con sistemas meteorológicos tropicales.
De esta forma, es como se presentan los “nortes” de la temporada en la Península de Yucatán.
Con los océanos calientes y la actividad de ciclones tropicales sobre el Atlántico Caribe y Golfo de México, favorece temporales de lluvia y posibles ciclones tropicales en la zona.
Con todo lo antes descrito, en la península suele darse un mayor riesgo de ciclón en otoño, pues tenemos ejemplos como la llegada del huracán “Isidore” un 22 de septiembre de 2002, el huracán “Wilma” a mediados de octubre del 2005 y el triplete de ciclones tropicales que afectaron a los tres estados en la pasada temporada 2020.
Independientemente de la afectación de algún ciclón tropical, también se generan temporales de lluvia significativos por la interacción entre sistemas meteorológicos polares y tropicales.
Las predicciones para lo que queda de septiembre es que una actividad y amenaza ciclónica mínima, pero en octubre entraría una etapa convectiva y favorable para el desarrollo de ciclones tropicales en la zona del Caribe, Golfo de México y Pacífico oriental, aumentando la amenaza ciclónica.
Con información de Meteored.mx