Tras la resolución del Juez de mantener la suspensión de actividades de mega granja de cerdos en Homún, pobladores esperan el cierre definitivo al haber promovido un juicio de amparo contra la filial de la empresa Kekén.
La organización Indignación anunció que el Juez segundo de Distrito, Rogerio Leal Mota, determinó mantener la granja porcícola cerrada debido a que el amparo promovido por infancias del municipio aplicó estándares internacionales en materia de consulta a la población indígena.
Argumentan que la empresa Producción Alimentaria Porcícola (PAPO) no presentó pruebas suficientes que derriben los motivos para sostener la suspensión impuesta.
“El primero, que la planta de tratamiento de aguas residuales no estaba concluida al momento de iniciar operaciones; el segundo, que no se hizo la consulta previa a la población maya de Homún; y el tercero, que ante el riesgo de que el funcionamiento de la granja podría afectarse al medio ambiente y, por lo tanto, debía aplicarse el principio precautorio”, detallaron.
“Además, se deben observar los estándares internacionales en la materia y ante la falta de certeza científica y la incertidumbre de contaminación, existe la obligación de prevenir todo daño grave o irreversible”, añadieron.
La agrupación señala que hay una intervención mal intencionada del gobierno del estado de Yucatán, ya que han intentado eliminar la suspensión a través de la Secretaría de Desarrollo Sustentable (SDS).
Agencias