El presidente Andrés Manuel López Obrador ha acusado a los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación de actuar de manera engañosa y calumniar al distorsionar sus declaraciones en la resolución relacionada con el caso de la senadora Xóchitl Gálvez, en la que se le imputa violencia política de género.
En su exposición, el presidente manifestó su preocupación por la forma en que se han alterado sus expresiones. “Lo que hacen es atribuirme palabras que no pronuncié durante esa conferencia. Es una situación realmente grave, pero ¿a qué tribunal podría recurrir yo? Podría solicitar un desafuero y cuento con pruebas, pero no voy a tomar esa vía, ya que eso convertiría a los magistrados en mártires vivientes.”
Durante su conferencia, López Obrador indicó su intención de mostrar fragmentos del expediente para informar a la población. Planteó la idea de una reforma electoral que permita que los tribunales sean elegidos por el pueblo en lugar de los partidos o la élite económica y política.
El presidente exhibió partes de la resolución en las que se le atribuyen frases que él niega haber dicho, como “es un pelele, un títere, una empleada de la oligarquía a la que van a utilizar para seguir saqueando y robando”. Aclaró que estas frases no son suyas y que se trata de un error de interpretación.
Haciendo referencia a la senadora Gálvez, López Obrador afirmó en términos políticos que “la señora Xóchitl Gálvez es Fox”, destacando la asociación con figuras políticas previas. Además, mencionó que se le atribuyó haber dicho que un grupo de hombres la puso en su posición actual, a lo que respondió de manera sarcástica: “¿Es que son puros hombres? Sí. ¿Y qué va a hacer? Nada, ya nada más porque me preguntas.”
En relación con su conferencia matutina, expresó que no cree que le vuelvan a suspender la transmisión. Subrayó que está exponiendo cómo manipularon sus palabras y que ya no mencionará más el nombre de la senadora Gálvez.
Dirección: Fernando Salvador Gil
Texto: Emmanuel C.