En un giro audaz durante su conferencia matutina, el presidente AMLO lanzó un desafío directo a YouTube tras la reciente controversia con la plataforma. Reviviendo el incidente provocado por una carta del New York Times, que resultó en la eliminación de uno de sus videos, AMLO mostró una postura desafiante, expresando su indiferencia ante la posibilidad de que su canal sea suspendido.
“No importa si me tumban el canal”, declaró, subrayando su compromiso con la libertad de expresión y su voluntad de enfrentar a gigantes tecnológicos en defensa de sus convicciones. Este enfrentamiento resalta las tensiones crecientes entre figuras políticas y plataformas digitales sobre el control y la difusión de contenido.