Renán Barrera, candidato del PAN a la gubernatura de Yucatán, ha hecho una firme promesa: en caso de ganar las elecciones, se compromete a contratar a médicos, enfermeras y camilleros despedidos por el gobierno federal de hospitales no afiliados al sistema IMSS-Bienestar. Esta declaración surge tras el anuncio de despidos y reubicaciones hecho este martes a trabajadores de la salud en la región.
El gobierno federal informó a estos trabajadores, contratados durante la pandemia por la Secretaría de Salud, que serán despedidos o trasladados a otras clínicas, incluso fuera de Yucatán, debido a la implementación del programa IMSS Bienestar. Esta medida afecta a hospitales en León, Oaxaca, Chiapas, Mérida y Ciudad Victoria, operados por personal de la Secretaría de Salud.
Barrera calificó este anuncio como “una tremenda injusticia”, destacando que se trata de 300 profesionales de la salud en Yucatán que enfrentan la incertidumbre laboral. En apoyo a estos trabajadores, el candidato se compromete a recontratarlos en su gobierno, garantizando así la continuidad de sus empleos y salarios dignos.
La manifestación del personal de salud frente al palacio de gobierno estatal refleja la urgencia de esta situación. Barrera reafirma su compromiso con la mejora de los servicios de salud en el estado y con el respeto a quienes han arriesgado sus vidas durante la pandemia.
Al concluir su mensaje, el candidato no dudó en criticar a Morena, acusándolos de destruir en lugar de construir. Su postura es clara: no permitirá que intereses partidistas pongan en riesgo la seguridad laboral y la salud de los yucatecos.