Tras una reunión de diversas comunidades mayas del estado de Yucatán con la encargada de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), María Luisa Albores, el Gobierno Federal se compromete a respetar la voz de estos pueblos y no otorgarán más permisos para establecer mega granjas de cerdos en la entidad.
Representantes de 8 comunidades mayas afectadas por la actividad porcícola se reunieron con Luisa Albores en el Pueblo Maya de Kinchil, epicentro del proceso de auto consulta donde los pobladores de Kinchil, San Fernando y Celestún le dijeron “No” a las mega granjas en el estado.
La reunión inició con la defensa de la libre determinación del pueblo maya y la denuncia del despojo de tierras en Homún, Kinchil, Celestún, San Fernando (Maxcanú), Chapab, Yaxkukul, Chablekal y Uayalceh.
También, señalaron la falta de acción de las autoridades ante las denuncias de los pueblos, situación que contrasta con el trato preferencial a los empresarios porcícolas.
De igual forma, recordaron que en noviembre de 2020, ciudadanos de más de 20 comunidades de la Península de Yucatán, denunciaron afectaciones ambientales ante el Consejo Nacional del Agua (Conagua), la Procuraduría Federal de Protección Ambiental (Profepa) y la Semarnat.
Es por esto que la titular de la Semarnat se comprometió a no entregar más permisos a nuevas mega fabricas, garantizar el proceso de participación de las comunidades en la determinación de sus ordenamientos territoriales y coadyuvar en los estudios y análisis de la calidad de agua.
Fuente: Indignación